La Real Casa de la Moneda de Sevilla era el centro
neurálgico donde se fundía el oro y la plata en los tiempos que las Indias eran parte de
la Monarquía
Católica. Después era convertido en marcos y doblones para
posterior sostenimiento de la economía europea en el Siglo de Oro. Tiene su origen
en una fábrica de pipiones y maravedís burgaleses
creada por Alfonso X.
La parcela donde actualmente se
encuentra el complejo no ha sido igual durante toda la historia de la ciudad,
aunque durante la época romana se cree que tuvo usos relativos a la actividad
portuaria. Uno de los muros de la Casa de la Moneda corresponde a la muralla de
la ciudad e, integrada en dicha muralla y a pocos metros del complejo, se
encuentra la Torre de la Plata, una torre almohade en el Corral de las
Herrerías, donde se encontraban las Herrerías Reales.
La parcela sufrió el amurallamiento
definitivo durante el siglo XIII y la historia de dicho complejo se ha podido
ligar también al palacio de Dar-al-Imara, una fortaleza-palacio musulmana del
913 relacionada a su vez con una anterior basílica visigoda y que suponen el
núcleo de lo que luego vino a ser el Alcázar de Sevilla, que se encuentra a
unos 500 metros de la actual Casa de la Moneda. El palacio musulmán del 913 fue
ampliado posteriormente por Al Mutamid, en la zona que corresponde a la
reconstruida por el rey cristiano Don Pedro, y con la creación posterior del
Qasr al-Zahí, residencia del hermano del Califa, situada en el margen Este del
Guadalquivir y que se encontraba o bien donde la Torre del Oro o bien donde la
Plaza de la Contratación. Los palacios o alcázares musulmanes y los propósitos
defensivos propiciaron un intenso amurallamiento de esas zonas
que hoy es patente. También, durante la época almohade, se creó un murete para
proteger la zona de las riadas. La zona que hoy es la Casa de la Moneda
albergaba el Palacio de Abu-Hafs, con sus correspondientes jardines y huertas.
Este palacio sería destruido posiblemente durante el asedio de la ciudad por
Fernando III y se convirtió en un edificio en ruinas, que posteriormente se
destinó a huertas y todo el entorno sería reurbanizado en siglos posteriores.
Donde se encontraba ese palacio también se encontraría la Atarazana de
Caballeros.
La llegada de los cristianos
revitalizará mucho el puerto a partir de la segunda mitad del siglo XIII. Esto
trajo también cambios urbanísticos asociados a la repoblación de la ciudad por
castellanos. Los espacios vacíos fueron ocupados con edificios nuevos en un
entramado urbano más regular que el propio de una ciudad musulmana. En la zona
se levantaron las Atarazanas por Alfonso X en el siglo XIII o el Colegio de
Santa María de Jesús y la Aduana en el siglo XVI. Pero estos edificios no
estaban propiamente en la Casa de la Moneda, sino en su entorno. Las naves de
las Atarazanas más cercanas a la Casa de la Moneda serían ya desde el siglo XIV
la aduana.
Lo que sabemos es que en el siglo
XIII la propia Casa de la Moneda eran un barrio de casas con corral que
anteriormente había sido cuadra y que eran patrimonio real. Por dicho barrio
pasaba un acueducto romano, posteriormente adaptado por musulmanes, con agua,
estos son los Caños de
Carmona, de los cuales aún se encuentran restos por la ciudad,
con destino al Alcázar. En dicho barrio Alfonso X ordena que se manufacturen
pipiones y maravedís burgaleses.
Esto hace que los gremios de
herreros y monederos tengan sus viviendas en la Casa de la Moneda y en el
Corral de las Herrerías. En 1478 los judíos construyen un nuevo barrio próximo
a esta área, el Corral de Jerez, entre Puerta de Jerez y la Casa de la Moneda,
pero serán expulsados de España en 1492.
La Conquista
de América
A España llegaron grandes cantidades
de metales preciosos de América y desde el 1500 hasta 1717 Sevilla tuvo
monopolio exclusivo sobre las mercancías que venían del Nuevo Mundo. La
cantidad de metales preciosos convertidos en monedas era tan grande que en no
pocas ocasiones se generaron crisis por hiperinflación.1 En los siglos de pleno
apogeo trabajaban más de 200 empleados que se encargaban de alimentar los
hornos y tener en funcionamiento la fundición.
Estaba ubicada en la entrada de la
ciudad, entre la Torre del Oro y
la Torre de la
Plata, todo lo que llegaba de la nueva América con destino a
la Casa de
Contratación lo supervisaba sin problema.
Ocupa una superficie irregular, más
bien de forma triangular, fue levantada en el mismo lugar donde antes se
encontraba la ceca desde el siglo XIII. Sufrió varias reformas
durante su uso como Real Fábrica, una reforma en el siglo XVI y otra en
el siglo XVIII,
cuando se le añadió la gran portada que conforma el acceso principal, obra
de Sebastián
Van der Borcht, así como otra serie de reformas de cara a
solventar problemas de filtraciones y estructurales derivados del terremoto
de Lisboa de 1755.
Edad
Contemporánea
Dejó de funcionar en el siglo XIX, sus instalaciones se
aprovecharon como conjunto residencial, poco a poco se fue abandonando y llegó
a deteriorarse de manera que se encontraba en estado totalmente ruinoso hasta
que a finales del siglo XX se
decidió su restauración, quedando un edificio semejante a lo que era en su
esplendorosa época. Actualmente solo queda por restaurar la portada principal,
cuyos edificios iban a aprovecharse como hotel, sin embargo el proyecto fue
suspendido por llevar a cabo atentados patrimoniales.
En la actual calle Güines de éste
barrio nació un 22 de mayo de 1.928 el genial cantaor Paco Palacios "El
Pali" también conocido con el sobrenombre de -El Trovador de Sevilla-. En
la puerta principal se encontraba hasta los años 2000 el bar La Moneda, en el
mismo recinto de la casa de la moneda se encuentra la Casa del Tesorero, que
actualmente es un restaurante italiano, donde durante las obras de adecuación
se descubrió la que se bautizó como la Torre de Bronce. Tercera defensa de la
ciudad y que estaba integrada en la misma Casa de La moneda. Datada del finales
del siglo XI, principios del XII
No hay comentarios:
Publicar un comentario