Ficha: Mismo nombre del enunciado.
Consta esta serie de 128 imágenes, habiéndose dividido en 11
entregas, siendo esta la octaba.
Grabadoslaurenceshand
wikipedia
https://visualelsewhere.wordpress.
sevillamiatours.com
Todocolección
ceres.mcu
(Museo de America)
museocarmenthyssenmalaga./buscar/obras/3
https://www.cuadrossevilla.es/eduardo_juarez.html
artealasocho.
otras fuentes van reseñadas en las
imágenes y/o textos explicativos.
Vista del Alcázar de Sevilla del siglo
XIX
Facade interieure del L´Alcazar à Seville.Litografía de circa
1845 del artista Nicolas Chapuy, litógrafo Asselineau. Procede de la
obra, Le Moyen Age Monumental et Archéologique, Paris 1844 – 1851,
3 Tomos. Litografía coloreada a mano.
Vista de Sevilla desde el monumento
del Cruz del Campo
Seville from the Cruz del Campo. Grabado en plancha de acero de
1834 de un dibujo de David Roberts. Grabado por Freeburn. Procede de la
obra, Jennings Landscape Annual or Tourist in Spain for 1836.
Andalusia. Thomas Roscoe
Vista de Plaza San Francisco del siglo
XIX
Sevilla. Plaza de la Constitución. Litografía hacia 1844 del
artista Nicolas Chapuy litografía de Benoist. Imprenta Lemercier,
Benard et Ce. Procede de la obra, L’Espagne. Vues des Principales
Villes de Ce Royaume Dessinées d`apres nature par Chapuy, N. Chapuy.
Vista de Sevilla del siglo XVI
Sevilla. Grabado de circa 1600 basado en el dibujo de Joris
Hoefnagel. Procede de la obra de G.Braun & F. Hogenberg Civitates
Orbis Terrarum, tomo 1, edición con texto en latín al dorso. Grabado
coloreado a mano.
Vista
de Sevilla del siglo XIX de la Audiencia Territorial
Audiencia Territorial. Litografía de 1862 coloreada a
mano. Procede de la obra, Viaje de sus Majestades a las provincias
andaluzas en 1862.
Plaza de los Conquistadores. Gran fuente y escalinata. Lámina hacia
1929 del artista Povo para la Exposición Ibero Americana, Sevilla
1929 – 1930.
Sevilla, Exposición de 1929.
Pabellones de las Industrias Agrícolas y Ganaderas. Lámina hacia 1929 del
artista Povo para la Exposición Ibero Americana, Sevilla 1929
Vista de Sevilla de Manuel García
Rodríguez
Entrada en Sevilla por la Puerta del Carmen, dibujo original de Manuel
García Rodríguez.Xilografía coloreada a mano de 1891. Procede del periódico Ilustración
Artística,.( Posiblemente hay un
error en el titulo y hace referencia a la Puerta de la Carne.)
Vista de una corrida de toros en la
Maestranza, Sevilla
The Bull – Ring at Seville. Grabado en plancha de acero de 1835 de un
dibujo del artista David Roberts, grabado por James Allen. Procede de la
obra, Jennings Landscape Annual or Tourist in Spain for 1836.
Andalusia. Thomas Roscoe.
Lámina
del Jesús del Gran Poder, Sevilla
Nuestro Padre Jesús del Gran Poder. Lámina de los años 1950 del artista J.
A. Velasco. Antigua mercancía de la tienda Casa Rubio de la calle Sierpes,
Antiguas tumbas, Sevilla
Tombeaux anciens
trouvez dans les Fauxbourgs de Seville. Grabado en plancha de cobre de 1715 de
Pierre van der Aa. Procede de la obra, Les Delices de L’Espagne et du
Portugal, Juan Álvarez de Colmenar.
Grabado de la procesión del Cornudo,
Sevilla siglo XVI
Hispalis. Grabado de 1598 en plancha de cobre del artista, Joris Hoefnagel. Procede
de la obra, Civitates Orbis Terrarum de Georg Braun y Frans
Hogenberg, tomo V,
Una escena del cornudo
con la vista del matadero, Caños de Carmona y antiguo rio Tagarete. Por la
parte superior tiene el famoso dicho, Qui non ha visto Sevilla non ha
visto maravilla..
En España, la Inquisición reprimía los delitos
sexuales. Entre los años 1578 y 1616 se persiguió la bigamia. Se pensaba que el
bígamo apoyaba el divorcio en el fondo y era un delincuente en la forma.
Al igual que la bigamia era castigada el adulterio, pero cuando
este era consentido por el marido, él era condenado también como “cornudo paciente”. Él
iba a la hoguera adornado con ramas de vástagos, que se parecían a las astas de
los venados.
Además, le colgaban campanillas, banderines y
cascabeles y llevaba las manos atadas. Su mujer con el torso desnudo azotaba al
marido con lo que se atan las ristras de los ajos. Esta a su vez recibía azotes
de penca.
Si había alguna mujer que había hecho de
alcahueta, ella encabezaba la procesión y la gente la arrojaba excrementos.
Detrás de todos iba un hombre que vociferaba y leía todo lo que se les acusaba
a los reos, otro con una lanza y dos alguaciles.
Todos ellos rodeados de hombres con antorchas,
que los acompañaban durante todo el recorrido hasta llegar al lugar donde eran
ajusticiados.