Francisco de Leygonier y
Haubert (Sevilla,
1812-1882),
fue un fotógrafo
español. También ejerció como marino mercante y es el
primer fotógrafo sevillano conocido.
De padres
franceses, pero nacido en el conocido barrio de Santa Catalina de Sevilla. Se
formó sobre la daguerrotipia
en Burdeos en torno a 1840-1842.
En 1841 habría realizado un
interesante trabajo de fotografía, de alto valor, sobre la transformación de la
ciudad. En sus imágenes recogió el derribo del antiguo convento de San Francisco,
en el centro neurálgico de Sevilla. Toda su vida profesional como fotógrafo fue
en España, en concreto trabajó en
Sevilla como fotógrafo desde 1842.
Abrió un estudio fotográfico
comercial en Sevilla en 1846
para realizar retratos y vender equipos ópticos.
También se dedicó a la enseñanza de la
fotografía, fue docente y maestro de distintas técnicas. Su mejor cualidad fue
la rápida asimilación y difusión comercial de los nuevos medios fotográficos.
En la dirección del estudio fotográfico le siguió su hijo Francisco Leygonier Ortiz,
fotógrafo, con estudio en el Patio de Banderas.
Esta considerado como el primer heliografista tipo Niépce y uno
de los más apreciados calotipistas.
Su actividad fotográfica fue intensa durante casi treinta años.
Particularmente conocido por sus calotipos,
principalmente de Sevilla. En la ciudad de Sevilla siguiendo su ejemplo y
enseñanzas surgieron un gran número de fotógrafos que utilizaron el proceso
calotipo, de quien fue uno de los más notables profesionales. En 1851,
una década después de que se publicaran los “puntos de vista heliográficos",
Leygonier estaba haciendo daguerrotipos
y negativos de placas de vidrio
al colodión húmedo, así como
positivos calotipo. Ese mismo año introdujo la fotografía en papel a la albúmina.
Desde que se descubrieron las placas de vidrio
estereoscópicas, Leygonier publicó anuncios en los que ofrecía una gran
variedad de imágenes de estos procedimientos. Pese a dominar todos los modernos
métodos innovadores, siguió practicando el proceso fotográfico del calotipo, al
menos hasta 1859.
Ejemplos de sus calotipos incluyen dos vistas del
Patio de las Doncellas en el Alcázar de Sevilla (Austin, U. TX, Ransom
Humanities Res. Cent.). No obstante, uno de las más importantes de sus trabajos
fue la fotografía, de alto valor testimonial, del derribo del antiguo convento
de San Francisco, de 1841. En el solar del antiguo convento se construyó la
plaza Nueva de Sevilla.
Algunos de sus trabajos sobre Sevilla formaron
parte de la colección del duque de Montpensier, cuyo
mecenazgo en su estancia en la ciudad alcanzó a fotógrafos como Vernay, el vizconde de Vigier
y Napper
No hay comentarios:
Publicar un comentario